Somos una aceleradora de negocios y fondo de capital privado. Nuestro principal modelo de negocio consiste en la generación de fondos de inversión para adquisición de vivienda de interés social para su remodelación y venta. .

Un fondo de inversión es una “canasta” que reúne el dinero de distintas personas que buscan crecerlo. En este caso, nosotros nos encargamos de reunir, gestionar e invertir esos recursos en distintos instrumentos para obtener la mayor rentabilidad posible .

A través de nuestro modelo de negocio obtenemos los ingresos que nos permiten ofrecer a nuestros inversionistas uno de los mejores rendimientos del mercado: el 18% anual fijo garantizado.

Está garantizado porque nuestras operaciones no están sujetas a la especulación de los mercados, ni tampoco estamos anclados a la tasa de interés bancaria de referencia que controla y emite el Banco de México; sino que nuestras operaciones están sujetas a los contratos individuales entre los inversionistas, los acreditados y nosotros.

Es muy fácil. El primer paso es proporcionarnos tus datos de contacto para que uno de nuestros expertos en inversiones se comunique personalmente contigo. El experto determinará tu perfil y te ayudará a crear una estrategia que se ajuste a tus propósitos. Todos nuestros trámites son completamente digitales.

Nosotros respaldamos el 100% de tu inversión ya que elegimos los modelos de negocio en los que se invierte y nos involucramos operativamente para que éstos tengan los resultados esperados.

Datos personales como: nombre completo, dirección, teléfono, RFC, CURP, clabe interbancaria de cuenta bancaria en México (cualquier banco) y fotografía de identificación oficial anverso y reverso (INE, cédula profesional o pasaporte). Datos del beneficiario, es decir, la persona que quedará a cargo de la inversión si llega a suceder alguna eventualidad con el inversionista (nombre completo, teléfono y correo electrónico). .

Debido a nuestro modelo y que no comercializamos créditos, valores ni productos financieros, no requerimos la autorización de la Comisión Nacional Bancaria de Valores (CNBV) ni de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF).